Sunday, June 17, 2012

La cocina española de Pedro – Tortas sevillanas de aceite con sabor a naranja

Vale, sí, Pedro en realidad no las HACE, pero encontró estas cosas tan ricas el otro día, aquí mismo en Reno, Nevada. Y en lo que se refiere a este blog, eso es suficiente.

 A estas cosas tan deliciosas se las conoce en España como “tortas de aceite” y al menos hasta ahora, yo sólo las había visto en: a) España, en cualquier sitio; b) una tienda especializada en quesos en Placerville, California; o c) de vez en cuando en el supermercado hispánico de la ciudad. Pero gracias a una visita espontánea al súper el otro día, ahora sabemos que también se pueden comprar en… ¡Whole Foods! ¡Yupiiiii!

 Y sí, ¡yupi! No sólo considero que es lo correcto informar de dicho descubrimiento, sino que es mi obligación moral hacerlo. Estas tortas sevillanas son como unas tortitas de maíz mexicanas pero fritas en aceite de oliva y, hasta ahora, sólo las había visto con azúcar y anís por encima. AHORA – gracias a Whole Foods, nuestra tienda de alimentos orgánicos – sabemos que también las hay de canela y de… ¡AY, POR FAVOR!...naranja amarga sevillana. ¡RIQUÍSIMAS!


 Os recomiendo de todo corazón que engulláis varios paquetes de estas tortas de aceite con sabor a naranja amarga. No sólo están hechas con aceite de oliva (típico ingrediente en la cocina española), azúcar y esencia de naranja, sino que ¡también vienen salpicadas con ralladura de cáscara de naranja sevillana! No sabría por dónde empezar a describir lo deliciosas que son. La cáscara de naranja sevillana tiene un cierto amargor que sirve para equilibrar el dulzor del azúcar – pero no con un sabor amargo realmente, sino con un fuerte sabor a naranja. Estas tortas se disfrutan normalmente en el desayuno, con una taza de café. Pero si tenéis la suerte de no ser cafeteros como es mi caso, ¡os sentiréis libres de las ataduras de los rituales del café y podréis meteros las susodichas entre pecho y espalda a cualquier hora del día y con cualquier bebedizo que os apetezca!


Así que si habéis ido a España y queréis volver a vivir el sabor del país, os sugiero que pilléis un paquete de éstas. O si no habéis estado allí y queréis tener una noción de lo que os estáis perdiendo y de por qué España debiera estar en vuestra lista de viajes, pillad también un paquete. O si os importa un rábano si alguna vez pisáis suelo español o no y simplemente os apetece algo con mucho sabor para picar, probadlas también.

Os lo digo yo…vuestras ansias por todo lo que es español se verán satisfechas con un paquete de estas tortas de naranja…bueno, al menos durante un par de minutos.

Sunday, June 10, 2012

Pura vida, desde luego


Playa a las afueras de Puerto Jiménez, Península de Osa,

Costa Rica
Bueno, pues acabo de volver de Costa Rica y ya estoy (desafortunadamente) acomodada de nuevo en mi aburrida rutina diaria aquí. El tiempo que pasamos en Costa Rica fue nada menos que extraordinario y lo que resultó especialmente chulo de este viaje fue que cada día tuvimos algún tipo de aventura que resultaba tan fascinante o más que la del día anterior. Dos de los tres lugares que visitamos son bastante remotos (para llegar a uno, Puerto Jiménez, tuvimos que coger un avión bastante pequeño y el otro sólo es accesible mediante una hora y media de bote por un río en medio de la jungla, el Parque Nacional Tortuguero). El tercer lugar, el volcán Arenal, es más accesible y por lo tanto más turístico, pero la experiencia que tuvimos en su parque nacional dio la sensación de ser tan lejana y solitaria como en los otros dos. No puedo ni siquiera empezar a hacer justicia de las muchísimas experiencias que tuvimos si intento meterlas todas en este blog, así que voy a dejar que las historias vayan goteando con el tiempo, de manera parecida a como lo hacen mis experiencias en España.

Pero por ahora, aquí tenéis una pequeña muestra de lo que vivimos en Costa Rica. Y tristemente y por última vez, al menos de momento… ¡PURA VIDA! para todos esos costarricenses con los que tuvimos el privilegio de compartir un poquito de nuestra vida.

Parque Nacional Matapalo, Osa Penninsula
circa de Puerto Jimenez, Costa Rica

Parque Nacional Arenal
La Fortuna, Costa Rica

Puesta de sol en el Parque Nacional Tortuguero

Costa Rica

Thursday, May 17, 2012

Costa Rica - ¡Allá vamos!

La península de Nicoya desde nuestro hotel en Monteverde. Enero 2006
Tras mucho debatir, planear y anticipar, salimos por fin hacia Costa Rica, ¡a pasar 12 maravillosos días! ¡Bien! Ya nos apetece hacer algunas excursiones fascinantes, ver un montón de vida salvaje, hacer multitud de fotos y comer un montón de buena comida costarricense.

No voy a escribir nada para el Pancake Merienda mientras esté allí, pero a lo mejor cuelgo algunas fotos en Facebook. Así que si todavía no somos amigos en Facebook, enviadme una “Solicitud de Amistad” y podréis ver lo que estamos haciendo allí.

Hasta entonces…¡Pura vida!

Sunday, May 6, 2012

La cocina española de Pedro


Pedro haciendo mil cosas a la vez con la tortilla española y…lo que esté troceando.
Una de las mejores cosas de estar casada con un español, o por lo menos mi español, es que él es el que cocina en casa. ¿Por qué? Bueno, ésa es una pregunta que requiere indagar más en la relación que los españoles tienen con la comida.

Se ha escrito mucho sobre la cultura española y su especial conexión con la comida. Esta relación, yo la caracterizaría como sagrada. La comida, a diario, es algo que debe ser reverenciado, preparado y disfrutado al más alto nivel. Los españoles, en su mayoría, rechazan la comida congelada –y la rápida- y prefieren los platos caseros preparados con ingredientes frescos. De hecho, en muchas tiendas de alimentación en España, sólo hay un pequeño congelador de comidas preparadas a diferencia de los múltiples pasillos dedicados a ella existentes en los supermercados americanos. Mientras que muchísimos americanos se han criado con comidas congeladas y para los que consumirla no supone nada (¡e incluso piensan que está bastante buena!), a la mayoría de los españoles la simple idea les parece repugnante. Esto no quiere decir que un español no coma platos congelados o comida rápida en absoluto; simplemente no lo consumen, ni por asomo, en las cantidades en que los americanos lo hacen.

Algún día puede que esto cambie en España al no tener las familias el tiempo necesario para preparar una comida un tanto complicada. Parece, sin embargo, que, en la actualidad, muchos españoles todavía van a casa de sus madres o abuelas al mediodía (a diario) a degustar las comidas caseras a las que están acostumbrados. Pero me es difícil imaginar que esto dure para siempre y la próxima generación puede que sucumba a la manera americana de comer, es decir, más comida rápida y, sí, más de los temidos platos congelados, debido exclusivamente a la falta de tiempo. Sin embargo, estoy segura de que los españoles negarán esto.


Huevos rellenos españoles - ¡de muerte!

En cualquier caso, cuando Pedro y yo nos casamos, establecimos un plan para compartir las responsabilidades culinarias. Mas no duró mucho, puesto que Pedro, como sus compatriotas, prefería la cocina española a mi comida americana simplonamente preparada. No recuerdo usar muchos alimentos congelados puesto que tampoco a mí me gustan, pero lo que cocinaba no podía sustituir el sabor de la cocina de su madre, el cual es capaz de reproducir de manera bastante exacta. Si pasamos hacia adelante los últimos diecisiete años, el fogón y la comida que comemos son su dominio exclusivo y, con muy raras excepciones, casi todo lo que él prepara –y los dos comemos- es comida española.

Lo que nos lleva a una nueva sección de este blog: La cocina española de Pedro. Me parece que, muy por dentro, Pedro siempre ha soñado con ser uno de esos chefs de la cadena de televisión Food Network y compartir con las masas la manera apropiada de preparar comida española. Aunque no puedo hacer ese sueño realidad, sí puedo compartir con los lectores los platos que prepara y un poco sobre la manera en que los prepara. Para la audiencia norteamericana, algunos platos se verán fabulosos, otros no tanto (acabo de perder la oportunidad de documentar una zarzuela mixta que hizo el otro día con pulpitos, entre otras cosas, a la que denominé “Sopa de Tarántula”. ¡Usad la imaginación!). Otros no son platos en sí, sino pequeñas delicias de su infancia que hoy hace para mí.


Toda una mesa de delicias españolas con champiñones al ajillo con jamón, tortilla española y salmorejo de remolacha.

Si tengo que ser justa, es a través de su cocina, de verdad, -y de las historias que la rodean- que he aprendido muchas cosas sobre su familia y sobre la cultura española. Y ahora espero compartir todo esto con vosotros.

¡Buen provecho!

Sunday, April 29, 2012

¿Qué hacer?... ¿Qué hacer?

Estas fotos fueron hechas en el mercadillo semanal de “el martes”, en Toledo.
He visto tantísimas cosas (baratas) que les encantarían a los americanos en estos mercadillos españoles.
¿Podría ganarme la vida vendiéndole esto a la gente en Estados Unidos? ¡Habría que verlo!
Desde que empezamos a hablar en serio sobre lo de mudarnos a España, he pensado mucho en lo que haría para ganarme la vida allí. Lo que no quiero hacer es mudarme y (ya veo las caras que pondrán mis amigos españoles y las risillas)…¡ser pobre! (mis amigos y familiares en España seguro que están pensando: “Te vas a mudar a España…¡pues claro que serás pobre!”). Tampoco necesito ganar montones de dinero pero sí lo suficiente para hacer las cosas que nos gusta hacer, ¡como viajar y comer bien!

Qué hacer para ganarme la vida en España es una de las preguntas más desalentadoras que me hago. Durante los últimos quince años, he trabajado como redactora de solicitudes de fondos para varias organizaciones sin ánimo de lucro o de servicios sociales en el norte de Nevada. En el campo de la redacción de solicitudes de fondos, una es la autora de casi todo, desde simples cartas a solicitudes formales en toda regla que tienen como propósito recaudar dineros para acciones caritativas y de ayuda. He trabajado fundamentalmente para agencias que proporcionan servicios sociales, otras que promueven las artes y ahora en una que se dedica a la formación y capacitación. No estoy segura de que haya una profesión así en España e incluso si la hubiera, el hecho de no hablar o escribir el idioma con fluidez me inhabilitaría para tal puesto. Algunos de mis clientes para los que he trabajado como autónoma me han dicho que podría seguir escribiendo sus solicitudes desde España, vía Internet o email, lo que ya prácticamente hago aquí. Eso estaría muy bien pero no creo que ganara lo suficiente para vivir.

Así que con la idea de mudarnos, tendría que reinventar esta cosa de la “profesión” otra vez. Después de terminar el Máster y darme cuenta de que ser profesora de universidad no iba a resultar, el encontrar otra profesión fue difícil. No tenía ni idea de lo que hacer. Entonces, como le pasa a mucha gente, me tropecé con otra profesión (solicitud de fondos) mientras trabajaba para una agencia que proporcionaba servicios a gente con sida y VIH. Encontré una profesión en la que podía utilizar mis habilidades con la escritura y en la investigación y además contribuir de manera positiva a este mundo. El resto es historia. Quince años después, sigo haciéndolo… y estoy un poco harta de ello, la verdad sea dicha.

¿Debería mi nuevo trabajo incluir la exploración de los mercadillos españoles?
Para mejor o para peor, el momento en que nos vayamos a vivir a España significará el final de mi carrera en el campo de la solicitud de ayudas. Tendré que encontrar algo nuevo. Como digo, no hablar el idioma bien (por lo menos al principio) me dejará como “no apta para el puesto” en casi cualquier trabajo normal durante algún tiempo. Esto, unido al hecho de que hay muy pocos puestos de trabajo disponibles en España, representa un obstáculo. En lo que estoy pensando es que voy a necesitar “crear” unos cuantos trabajillos que me permitan ganarme un sueldo. Algunas de las cosas que estoy considerando son enseñar inglés a tiempo parcial (aunque en realidad no me gusta la docencia; quizás en España la cosa sería diferente); tener un pequeño negocio de importación/exportación por internet con muchas de las cosas tan interesantes que se encuentran en los mercadillos españoles (¿Ir de compras profesionalmente? ¿En España? ¡Bieeeeennnnn!); vender mis fotos por internet (aunque necesitaría una cámara mejor, sin mencionar el detalle de tener algo más de experiencia); y también seguir trabajando con algunos de mis clientes de Nevada en lo de los fondos.

Pero, dejando la realidad a un lado…siempre mola soñar despierta con lo que PODRÍA ser. Lo que de verdad nos gustaría que sucediera es encontrar un pequeño “bed and breakfast”, comprarlo y renovarlo, bien en la playa o en la montaña o incluso cerca de Toledo. Tengo intención de continuar con mi blog sobre España y, claro está, este blog recibirá tanta atención que se convertirá en un libro y entonces me ofrecerán la oportunidad de tener mi propio programa de televisión sobre viajes en España, similar al que tiene Anthony Bourdain (“No Reservations”), aunque por naturaleza no tengo su desparpajo. Ni tampoco bebo tanto como él. Y de este programa saldrán conferencias y presentaciones que, por supuesto, pagarán muy bien. De hecho, sólo tendría que hacer esto durante unos años y después retirarme a nuestro bed and breakfast, que para entonces se habrá convertido en nuestro domicilio personal, donde nuestros familiares y amigos se podrán quedar… ¡gratis!

¡Las delicias de “el martes”!
¿Qué os parece? ¿Debo ir a lo seguro y dedicarme a la enseñanza? ¿Debo hacerme “compradora” profesional? ¿Fotógrafa por internet? ¿O debería hacerme rica y famosa como si fuera un James Michener moderno?

Yo sé lo que quiero hacer.

Sunday, April 22, 2012

¡Que empiece la temporada de vacaciones!

Ya estamos otra vez en primavera y cómo no… ¡está nevando en el norte de Nevada! Incluso después de un invierno anormalmente cálido y seco, la primavera aquí sigue fiel a su reputación de ser fría, ventosa y con bastante nieve. ¡Argh!

Pero la otra cara de la moneda es que nos proporciona mucho tiempo para planear las vacaciones de este año. A Pedro le gusta mencionar, sin embargo, que nuestra “temporada” de vacaciones realmente  no ha terminado o empezado este año. Las vacaciones de Navidad las pasamos en San Diego; él se fue a Florida en febrero; fuimos a San Francisco y Point Reyes en marzo; y yo bajé a Los Ángeles una semana después. Así que aquí estamos, en abril, que es cuando normalmente planeamos los viajes del año.


Pedro debajo de la catarata cerca del Peace Lodge en Costa Rica, el cual sufrió daños graves durante el terremoto de 2009. No estoy segura de que esta catarata exista todavía, puesto que hubo un gran corrimiento de tierra en los alrededores de donde está (o estaba).
Este año no me “toca” ir a España, así que, en su lugar, vamos a volver a Costa Rica en mayo. Estuvimos allí hace cinco años y nos encantó de todas todas. Vamos a visitar el Parque Nacional Tortuguero, el volcán Arenal (de nuevo) y la península de Osa en el sur del país. A nuestro regreso,  Pedro hará una colada rápida y saldrá para España hasta agosto (está pensando en echar un vistazo serio a alguna vivienda en la playa o la montaña pensando en cuando nos mudemos allí). Yo tendré la suficiente suerte (¡¿?!) de volver a mi trabajo para todo el verano y, quizás, una escapadita a Los Ángeles en julio. Cuando él vuelva en agosto, nos iremos a Mammoth Lakes a pasar nuestras vacaciones anuales con mi familia y, a lo mejor, hacemos rafting en el río American (norte de California) en septiembre. También quiero volver a Los Ángeles en el otoño, para bien ir a un partido de fútbol americano de la Universidad de Southern California o bien verlo en la tele con mi hermano y mi cuñada. También en el otoño iremos, probablemente, a Apple Hill un par de veces, a coger frambuesas y castañas. Y para las vacaciones de Navidad de este diciembre, espero que vayamos a algún lugar cálido.


El volcán Arenal desde el porche de nuestra habitación.  Espero que podamos ver la cima la próxima vez.
¡Hay tantos sitios a los que queremos ir! Estoy deseando poder ir a visitar a mi amiga Julie y su familia en Inglaterra (quizás el próximo verano de camino a España). Los dos estamos deseando ir a Australia a visitar a mi gran amiga Stacy y su familia en Perth. Pedro se muere por ir a Nueva Zelanda a visitar “Hobitton” y simular que es Légolas, el de “El Señor de los Anillos”. A mí me encantaría ir al sudeste asiático, simplemente por conocer un sitio totalmente diferente. Y antes de que nos mudemos, creo que él debería ver más de los Estados Unidos: la costa noroeste del Pacífico y especialmente el sur del país. A mí me gustaría conocer el sur de Florida y experimentar la cultura cubanoamericana que se ha creado allí y bajar hasta los Cayos. Y por supuesto queda el noroeste y Nueva Inglaterra, algo que siempre he querido ver. ¡Ah! Y también tengo ganas de ver a nuestros amigos de Iowa. En fin, - ¡tantos lugares, tan poco tiempo y dinero!

Mientras tanto, tengo que empezar a preparar mi visita a esos ticos. ¡Pura vida!

Pedro contempla el bosque lluvioso en Costa Rica.

Enero 2006.


Sunday, April 15, 2012

¡Ningún momento es bueno para irse a vivir a España!

Esa es la respuesta que siempre me da Pedro cuando le pregunto que cuándo piensa que deberíamos mudarnos.  Y siempre me hace reír. :)

¿Y por qué no vivir aquí?
Mazarrón, España

Uno de los objetivos que me he marcado con este blog es el de documentar el proceso de nuestro, tan previsto como esperado, cambio de residencia. Durante los últimos seis meses, hemos hablado mucho sobre cómo hacerlo y, tal y cómo lo vemos ahora, éste es el plan: nos mudaremos en unos tres años, como mucho. ¿Por qué tres años? Porque será para entonces cuando ya tenga derecho a una pensión de jubilación en su totalidad (lo explico más abajo) y porque esperamos que para entonces las condiciones económicas en España hayan empezado a mejorar. Pero creo que, al fin y al cabo, concuerdo con Pedro: probablemente NINGÚN momento es perfecto para llevar a cabo un cambio como éste.

Para mis amigos y familia españoles, lo de “tener derecho a la pensión en su totalidad” va, grosso modo, así: Las pensiones de jubilación concedidas a un trabajador por su empresa (privadas) son algo del pasado en los Estados Unidos. La pensión del gobierno (pública) es más bien irrisoria y no en todas las empresas existe. Así que la solución para financiarse la jubilación consiste en que los trabajadores “ahorren” una parte de su sueldo en un plan semiprivado al que la empresa también contribuye, algunas veces igualando, si se tiene suerte, las cantidades que el trabajador va contribuyendo, pero siempre hasta un límite porcentual. Pero lo complicado de esto no acaba aquí. Para que una empresa iguale el 100% de lo que el trabajador aporta a ese plan de pensiones, éste último debe permanecer en la empresa durante un mínimo de años. En mi empresa, el mínimo es cinco años. Estoy a punto de cumplir dos años en este trabajo, así que para recibir el 100% de la contribución empresarial, tengo que estar otros tres años. Siempre me puedo ir antes, pero entonces me retirarán un porcentaje de dicha contribución.

¡Estaría chulo restaurar esta casa Antigua de Toledo…
…justo al lado de este bar tan chulo!
Desde un punto de vista financiero y práctico, resulta buena idea esperar esos tres años. Eso garantizará un pequeño “colchón” adicional además de lo que ya tenemos. Y si nos fuéramos a jubilar en este país (algo de lo que no estoy segura de que ni siquiera podamos permitirnos), entonces necesitaríamos ese dinero. Y aunque España esté reduciendo los servicios a sus ciudadanos, jubilarse allí siempre será más accesible que aquí y este dinero también ayudará en tal situación. Y, de nuevo, esperamos que en tres años la situación económica en España sea menos volátil que ahora.

En cuanto al aspecto emocional, pues bueno… ese cuento es diferente. Los dos estamos bastante hartos de nuestras profesiones actuales y nos apetece mucho empezar a construir algo nuevo en España. Lo que ese “algo nuevo” sea, aunque tenemos algunas ideas, no lo sabemos todavía. Pero el problema es cómo poner esas ideas en práctica, algo de lo que ninguno de los dos está seguro. Lo que sí sabemos es que ambos estamos listos para iniciar esta “aventura” y si pudiéramos echarla a andar mañana mismo, probablemente lo haríamos.

Desafortunadamente, la realidad se interpone en el camino y los aspectos prácticos pesan más que el soñar. Pero seguimos soñando y hablando y haciendo planes provisionales, sabiendo que, un día, daremos el salto. Hasta entonces, seguimos viviendo…y viviendo…y viviendo…y disfrutando la buena vida que llevamos ahora.

También creemos que estaría chulo restaurar este sitio, con sus balcones de filigrana…
¡Leche! ¡¡Parece que este minino se nos ha adelantado!!

Tuesday, April 10, 2012

¿Estabais contando los meses?

Vale, han pasado ¿cuántos?... ¿tres, cuatro, cinco meses desde mi último blog?

Pedro y yo acabamos de volver de nuestra excursión anual, en las vacaciones de primavera, a la costa de California, más concretamente a San Francisco y nuestro adorado Point Reyes. Aparte del necesitado y merecido descanso de la rutina diaria, estas vacaciones también me proporcionan tiempo para pensar en lo que de verdad me encanta hacer y para darme cuenta de dónde descansan mis verdaderas pasiones. Y, cómo no, mis pensamientos volvieron a este blog. ¡Hay tanto que quiero compartir!: las idiosincrasias de nuestra existencia intercultural, del futuro traslado a España y mis impresiones sobre España en sí, con todas sus complejidades e ironías que tanto me fascinan. Y por supuesto, lo mejor del blog: el espacio que nos proporciona a mí y a mi familia en España para conocernos a niveles un poco más profundos sin la barrera del idioma.

He tomado la determinación de hacer de este blog una parte funcional y sostenible de mi vida. Así que aquí va – lo vuelvo a intentar.

Mientras tanto, aquí tenéis unas fotos de lo que hemos estado haciendo desde noviembre. ¡Disfrutadlas!

La Primera Degustación Anual de Tapas con nuestros amigos Harry y Christina. Diciembre 2011

Excursión a San Diego/La Jolla durante las vacaciones de Navidad. Diciembre 2011

Nos hicimos amigos de una foca algo tímida en la playa de La Jolla. Diciembre 2011

Sierra Nevada. Cursillo de fotografía de escenas invernales. Enero 2012.

Parque Galena Creek, Reno. Cursillo de fotografía de escenas invernales. Enero 2012.